Rivas viaja a Mengibar con hambre de victoria
Toca viajar, un viaje de esos incómodos desde que te subes al bus, en el parking del Cerro del Telégrafo, hasta que acabas el encuentro, si el resultado es positivo, en caso negativo el viaje de vuelta será más duro aún.
Desde el momento en el que los jugadores pongan sus pies en el Classic Bus que les llevará hasta la ciudad jienense, comenzarán las incomodidades. Las casi 4 horas de trayecto, para recorrer los 311kms que separan el Cerro con el Sebastián Moya, hacen del desplazamiento el primer obstáculo. El segundo, y el más importante, el partido.
Un encuentro que tiene como principal aliciente, el puesto de colíder que ocupa el rival, el Software DELSOL Mengíbar. Además de la dificultad del rival, que no ha perdido aún ningún encuentro y suma 14 de los 18 puntos jugados, se añade el factor cancha. El público de Mengíbar es uno de los más ruidosos, y la presión en el pabellón se hace notar en la pista.
Para hacer frente a todas estas dificultades, el equipo ripense tiene una clara motivación, la victoria. Romper la racha del rival y llevarse los tres puntos de Mengíbar es el principal incentivo para los leones. La necesidad obvia, es otro de los motivos. Con solo un punto en la clasificación, los de Rivas Vaciamadrid son últimos. La mala suerte, las lesiones y la falta de experiencia a la hora de cerrar partidos, han pasado factura a una plantilla que tiene calidad de sobra. Un equipo que domina por momentos y sabe a lo que juega, sin embargo se han escapado muchos puntos por el camino. La defensa sólida y los goles en jugadas ensayadas, son las mejores armas de los leones, y tendrán que explotar esas cualidades para poder sacar un resultado favorable.
Juanjo Lozano no podrá contar con Javi Fernández y Ballano que siguen recuperándose de sus lesiones, además del goleador del último partido, Cuadrado. En portería, Vesko acompañará a Eric. Lozano recupera a Jorge García que volverá a la convocatoria tras un mes de lesión por una hernia.
A pesar de la distancia, el viaje, la presión del público o la dificultad del rival, Rivas tiene una motivación, la necesidad de ganar, y esas ganas de ganar, son mucho más fuertes que todo lo demás.